miércoles, 13 de abril de 2011

La Resurrección en el Pregón de la Semana Santa de 2011

De esta forma tan sublime se exalto el Domingo de Resurrección, durante el pregón de la Semana Santa que tuvo lugar el pasado Domingo de Pasión y cuyas palabras salieron del corazón cofrade y cristiano de nuestra paisana Cloti Sánchez, que como todos sabemos a estas alturas es la pregonera del presente año.

A continuación podrán leer la parte titulada Resurrección y dedicada a nuestra Corporación. Un vez más, enhorabuena Cloti.



Huye la muerte en la calle por los senderos de la vida.

la negrura de la noche se está deshaciendo en día

y en el perfil de una nube sin quererlo se dibuja

la huida de la muerte ante tanto amor ya rendida.

la madera de la cruz , serena fría y vacía.



Tu rostro nazareno descubierto por la brisa,

libre de capirote y despojado de túnica,

mira ampliamente al cielo mientras la pena agoniza.

Y en esa inmensa alegría que la mañana le brinda,

al repique de campanas y con aromas de lilas

va rozando la gloria en la mañana bendita.



Entre los jardines del palacio y la fuente de la plaza, un grupo de niños divertía su tiempo adentrándose ya en la juventud. A su paso por la sacristía, llamados por el olor a incienso que desprendía, clavaban su mirada en el deseo de convertirse en el futuro cofrade de Guadalcanal.

El padre Eduardo que Dios tenga en la gloria, advirtió ese deseo infantil y se fundió con ellos en una mezcla de miedos e ilusiones. Juntos comenzaron esta andadura por la vida cofrade de Guadalcanal. Así nació la Resurrección , un nuevo proyecto cristiano juvenil y cofrade, que llenaría las calles de alegría y júbilo y haría de este domingo, donde hay que centrar la fe del cristiano, un vergel de sensaciones y sentimiento.

Y es que Dios quiso poner en sus manos, esa pluma para escribir con mayúscula, un renglón en la historia cofrade de Guadalcanal.

Hoy esos niños han crecido y son hombres de fe. Su deseo creció con ellos y la resurrección, es una de las hermandades más grandes de nuestra Semana Santa.

Si Grande, grande por el misterio que representa, grande por su rápida evolución y grande por su entregada junta de gobierno.

y de toda esta grandeza Cristo se enamoró. Por eso, cada año al llegar la primavera, despierta del sueño de la muerte, ante un pueblo redimido del pecado, que a los gritos de aleluya se postra ante sus pies.



No quiso Dios aquí en la tierra

grandes tronos que resalten su realeza

prefirió la luz y la belleza

oculta en los olivos de la sierra

quiso el azahar de los naranjos

el agua de la fuente de la plaza

el metal de la campana y el badajo

y el reflejo del sol en la terraza.



No quiso Dios túnicas doradas

ni coronas que en oro relucieran

si no lanzas que su espalda flagelaran

y espinas que su frente recubrieran

y quiso morir entre los muros

que albergaron altares y plegarias

quiso un cielo gris oscuro

que apagó su intensa luminaria

y esa tiniebla oscurecida

que el mundo limpiara de pecados

se torna en luminosa amanecida

ante el cuerpo de Dios resucitado.



Resurgen en la plaza las campanas

se inunda de alegría el campanario

se perfuma de incienso la mañana

y se esfuman las sombras del calvario

la mañana de sol resplandecida

abre sus pétalos en flor

amanece la pascua florida

a la vida y la resurrección

Fragmento del Pregón de la Semana Santa 2011, pronunciado el 10 de abril en el Teatro Municipal de Guadalcanal.
(C)Cloti María Sánchez Uceda